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Departamento de Policía de Scottsdale, Arizona
El Abierto de Phoenix es un torneo de golf profesional del PGA Tour, celebrado en el Tournament Players Club de Scottsdale, Arizona. La policía de Scottsdale se coordinó con el personal de seguridad del PGA Tour, incluidos miembros del FBI, de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos, y el Ejército de los EE. UU. Las fuerzas especializadas utilizaron los servicios de agentes caninos, técnicos en artefactos explosivos y policías motorizados, unidades ciclistas y unidades montadas. Cada centímetro de los terrenos del PGA tour estaba vigilado y protegido, pero el espacio aéreo seguía siendo vulnerable. Al volar cerca del evento, los pilotos se arriesgaban a infringir las leyes federales sobre el espacio aéreo diseñadas para proteger eventos públicos y el aeropuerto local, situado a apenas tres millas del lugar protegido. Un avión no tripulado podría obstaculizar la capacidad de la policía de Scottsdale y otros miembros del personal de seguridad para responder desde el aire en caso de emergencia. Con el fin de establecer el estándar de excelencia en seguridad, y seguir proporcionando a los organizadores de eventos de talla mundial una zona segura para llevar futuros programas, la policía de Scottsdale recurrió a la tecnología de Dedrone para conocer la actividad de su espacio aéreo y utilizar la información para desarrollar nuevos protocolos de seguridad para eventos.
Aerial Armor, socio de Dedrone, supervisó la instalación y el despliegue de DedroneSensors y otros sensores pasivos, incluidas cámaras. La policía de Scottsdale mantuvo una conexión en directo con DedroneTracker.AI y proporcionó actualizaciones diarias del estado de la actividad en el espacio aéreo, con cientos de drones intrusos registrados durante los 5 días que duró la instalación. DedroneTracker.AI comenzó inmediatamente a rastrear la actividad, con más de 20 drones detectados en el primer día de instalación.
La policía de Scottsdale supervisó activamente la actividad del espacio aéreo y pudo proteger a los atletas de la PGA, a los medios de comunicación y a los asistentes de las interrupciones provocadas por los drones todos los días del evento.
Cada año que organizamos este evento, buscamos tecnología que mantenga a salvo a la gente. La tecnología avanza en el sector privado, así que tenemos que seguir su ejemplo. Los drones están más extendidos que nunca, son baratos y fáciles de obtener y plantean riesgos para todo aquel que participan en acontecimientos deportivos como este.
Sargento Austen George, Scottsdale PD a FOX 10 Scottsdale
